En carpa por la Costa del Sol

Finalmente nos sentimos un poco mas cómodos en el coche (acá no se le dice auto) y emprendimos lo que fue el viaje por la Costa del Sol y el resto de la costa andaluza. Les vuelvo a hacer una breve ubicación geográfica para los mas despistados. El viaje que hicimos fue por lo que es la costa sur de España, que coincide con que es todo parte de Andalucía. Lo primero que hicimos fue Cabo de Gata que es justo donde la costa que da al Mediterráneo dobla (no es un termino muy geográfico pero es así) y de ahí fuimos hasta Cádiz (que es donde dobla pero ya en el Atlántico). Acá se le llama Costa del Sol, es un nombre turístico, a lo que va sobre el Mediterráneo desde Algeciras a Málaga, que seria la zona mas cheta... dicho esto comienzo con el relato.

La hoja de ruta fue la siguiente: Cabo de Gata, Almería, Malaga, Torremolinos, Fuengirola, Marbella, Puerto Banús, Algeciras, Tarifa, Conil de la Frontera, Cádiz, Jerez de la Frontera, Sevilla, Granada. Obviamente no paramos en todos lados porque estuvimos nada mas que diez dias, todo el recorrido fue de 1200 km. Lo mas lindo en contra de todo lo que yo me imaginaba es la costa del Atlántico, o sea los pueblitos que están cerca de Cádiz. Las playas son mucho mas salvajes, para que se den una idea en l;a zona de Marbella los chiringuitos de la playa son restaurantes de cien cubiertos y que no bajan de 20€ por persona. Bueno, estoy viendo que esto se esta volviendo un poco tedioso así que voy a empezar de nuevo haciendo el recorrido y contando lo mas relevante.

En Cabo de Gata paso todo lo relatado en la entrada anterior, con lo del asado y eso. De ahí partimos directamente para la Costa del Sol (Costa del Golf también, aunque no pude hacer ningún swing por falta de facha), en el camino visitamos las Cuevas de Nerja (pongo un link para que se interioricen en el tema), que la verdad fue de lo mejor del viaje. Son unas galerías imponentes con estalactitas y estalagmitas de 10 metros de diámetro, parecía sacada de el Señor de los Anillos (para los que vieron la película, era Moria) y obviamente no creo que en las fotos se aprecie del todo. De ahí la idea era saltear Málaga, que es una ciudad grande e ir a los pueblitos de la costa, cuando llegamos a Torremolinos nos dimos cuenta que esta unido con Málaga y es un pueblito lleno de edificios y shopings, en el que te cruzas con autos salidos de películas y no ves un español ni de casualidad, todos gringos. Visto esto decidimos seguir a Fuengirola, que estaba cerca y comprobamos que estaba unida a Torremolinos, así que ahí encontramos un camping en la loma del orto (cosa que no calentaba porque andábamos en auto, tomá) y nos quedamos un par de días. Las playas muy lindas, sobre todo en esta época en la que hay poca gente, pero muy industrializadas. Lo de los chiringos que dije antes y las playas todas como los paradores de quilmes y esas cosas en la Costa Argentina. De ahí seguimos para Cabopino (lo mas lindo de esta zona), un lugar en el que casi no vive gente, hay un puerto con unos yates tremendos y unas playas muy tranquilas y chiquitas con poca gente. Como nos gusto mucho este lugar hicimos base y aprovechamos para conocer Marbella y Puerto Banús, no  lo encontramos a Torrente pero si comprobamos que hay mucha plata y unos autos increíbles (también habían hippies que hacían pulseras y sabían como 50 nudos), pero te das cuenta que no es un lugar para gente como uno. Desde allí emprendimos viaje para la zona de Cádiz, donde sabiamos que estaba Pao una amiga de Meli y Dani de Pehuenia. Para llegar pasamos por Tarifa, un lugar que nos impacto desde el principio, las playas son interminables, con una arena blanca y agua turquesa, y lo que se ve del otro lado del agua es África (cosa que no se por que genera algo raro, te hace sentir como que estas lejos). Acá llega la mejor parte del viaje, toda esa costa es preciosa y con pueblitos en serio, sin shopping, con andaluces, playas muy lindas y chiringos de madera en la costa. Ahí estuvimos dos días en casa de Pao y la pasamos realmente muy bien. Ya de ahi pegamos la vuelta a Granada porque estaba hasta las pelotas de la arena y el sol, obviamente para comprobar que acá en Granada hace mucho mas calor y no hay mar ni pileta para remojar las patas.