viernes, 14 de noviembre de 2008

Somos los mismos de siempre...

Ahi estamos en el recital, quise subir un video pero no pude


Para los que no sepan bien como es la cosa les voy a hacer una pequeña introducción. La Renga es una de mis bandas favoritas y a la que mas veces he ido a ver. Me había quedado con las ganas el año pasado ya que Sobisch no los había dejado tocar y que pasó… vinieron a Málaga. Las entradas ya las habíamos sacado en el Carrefour de acá, de Granada, así que el martes agarramos una mochila con un par de cosas y partimos rumbo a la ciudad costera. Esta cerca así que en un par de horas estábamos ahí, vimos un par de hoteles en el centro y nos metimos en uno que estaba bastante bien, dejamos las cosas y recorrimos un poco lo mas típico de la ciudad (mas adelante les cuento). Volvimos al hotel bastante cansados así que nos echamos un ratito y salimos rumbo al recital. Ya en el bondi empezamos a disfrutar de esa sensación de recital en Buenos Aires, de a poco iban subiendo argentinos con remeras alusivas a la ocasión, eso si, sin los inadaptados de siempre que van cantando y golpeando los vidrios a modo de bombo. Llegamos al lugar y si, afuera estaba lleno de gente tomando birra haciendo tiempo para entrar, como nosotros no teníamos nada para beber nos metimos a la sala, un lugar tremendo, chiquito (tendrá capacidad para 500 personas), cosa que en Argentina es imposible para La Renga. El recital estuvo excelente, un poco mas corto de lo habitual pero con el espíritu de siempre, tocaron muchos temas viejos así que Mariana lo disfruto mucho también.

Ahora les voy a contar un poco de lo que vimos de la ciudad. En nuestro viaje por la Costa del Sol no habíamos parado en Málaga, y la verdad que es mas linda de lo que esperábamos. Viendo los folletos que te dan en turismo nos enteramos que Picasso nació ahí, por lo que hay un museo con cuadros suyos y ahí fuimos. Como ustedes sabrán no soy muy entendido en el tema arte, por no decir que no cazo un fulbo, pero algo entiendo… puedo distinguir claramente entre un cuadro de Dalí, uno de Picasso y otro de Van Gogh (el de Dalí tiene relojes y el de Van Gogh girasoles, que aunque sean ambos redondos son cosas distintas). Bueno, desde mi ignorancia ya citada puedo afirmar que los cuadros de Picasso son de los que mas me gustan (esto ya lo sabia antes de ir al museo, ojo), verlos en directo es algo muy impactante, algunos por el tamaño y otros por el solo hecho de que están sin marco ni nada. Una experiencia muy buena y que no estaba en los planes para nada. El resto de la ciudad antigua la vimos por arriba, muchas iglesias, y algunas construcciones árabes que no se comparan con lo que hay acá en Granada.
El miércoles pegamos la vuelta, con una mezcla en la cabeza de canciones de La Renga y pensamientos siniestros de que había que volver al trabajo, pero teniendo en cuenta que empieza la dulce cuenta regresiva a las esperadas y por que no merecidas vacaciones. Hasta entonces…